De Molen Amarillo.

Vamos hoy con esta Imperial IPA de los holandeses que promete. Siempre con su sobria etiqueta, está elaborada con maltas pils y caramelo, y tiene este nombre puesto que han hecho un dry hopping con este lúpulo. Tiene 9,3% APV y 60 IBUs, bueno, aquí dejamos un detalle de la etiqueta en el que se pueden leer todas estas características.
En vaso tiene color ámbar, 23 EBC es lo que reza la etiqueta, nosotros no habíamos visto este detalle y en la cata anotamos 22 EBC. Tiene una capa de espuma pobre que desaparece casi de inmediato. No es muy opaca y deja sedimentos flotando. En nariz no es muy intensa y es equilibrada. Tiene aromas a avellana tostada y caramelo, también deja notas herbáceas, a pino y a mandarina. En boca es más intensa y sigue siendo equilibrada. Las notas cítricas son más débiles y notamos más la complejidad de las maltas usadas, a pan tostado y caramelo. También hay sabores resinosos y especiados, de canela un poco picante. Tiene un cuerpo de densidad media y una carbonatación buena para el estilo. Es suave y cálida en boca, con una sensación inicial de una bebida espirituosa, que desaparece en cuanto notamos la carbonatación. El final de esta cerveza es largo, intenso y equilibrado. Es complejo, notamos con fuerza el dulzón toque del alcohol, quedando un retrogusto final cítrico y floral.
Una Imperial IPA muy potente y con una complejidad muy sabrosa. Una cerveza para saborear con tranquilidad y disfrutar de su suave cuerpo. Un pero, por poner uno, la falta de intensidad del aroma, por lo demás, un cervezón. ¡Salud!

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