Menú con maridaje en Forty Burguer.

El pasado jueves 12, el restaurante Forty Burguer (Madre de Dios 15) organizó un menú maridaje guiado por el sumiller Edgar Rodríguez Tello en el que querían presentar la nueva linea de cervezas que han incluido en su carta.  La presencia de Edgar, sumiller del Racó d'en Cesc de Barcelona, es ya de por sí todo un lujo, y el menú de hamburguesas terminó de convencernos, así que allí nos plantamos dispuestos a escuchar, aprender y a disfrutar. Además sólo conocíamos una de las cervezas que maridaban las hamburguesas, todas de las cerveceras Foxes Rock (Irlanda) y Kentucky Ales (EEUU), por lo que el plan era redondo.

Tras una presentación por parte del restaurante y del sumiller comenzamos con el primer maridaje, una hamburguesa de buey con una Foxes Rock Red Ale. La cerveza era suave, con mucha presencia de caramelo y unos toques terrosos finales, nada estridentes, acompañó muy bien una carne tan exquisita. Una cerveza que personalmente no es una favorita pero que sirvió muy bien de base para resaltar el sabor del buey.  Seguimos con una hamburguesa con jamón serrano y manchego y una Foxes Rock Pale Ale. Esta cerveza era algo más amarga y fresca, cumplió su papel ayudando a limpiar la boca tras sabores algo más intensos como el jamón o el queso manchego, pero con poca personalidad. Luego nos sirvieron una hamburguesa de ternera con boletus con una Kentucky Ale. Esta hamburguesa estaba deliciosa, las setas le dan un toque muy particular y sabroso. La cerveza con notas terrosas redondeó un maridaje que realmente sabía a terruño. La siguiente fue una hamburguesa con parmesano con una Foxes Rock IPA. Esta cerveza fue probablemente la que más nos gustó de la noche, fresca y resinosa, buen acompañamiento para el sabor del parmesano. El quinto maridaje lo compusieron una hamburguesa de Black Angus y una Kentucky Bourbon Barrel, ambos sabores muy intensos que se complementaron. La Bourbon Barrel tiene quizás un sabor a bourbon demasiado evidente, pero desde luego es una cerveza interesante. Terminamos con los sabores más fuertes, una hamburguesa mexicana con una Kentucky IPA. El maridaje de sabores picantes con cervezas amargas es ya todo un clásico, que funcionó bien. Esta IPA era menos aromática que la anterior, con un cuerpo más carameloso. Es curioso que la IPA europea nos pareció más americana que la americana....

 
Un gran menú del que pudimos disfrutar a un gran precio. Todas las hamburguesas eran de muy alta calidad, especialmente nos gustaron la de buey y la de boletus, aunque esto es una apreciación personal. Y los maridajes propuestos estuvieron muy bien pensados y explicados por todo un profesional. Tras la cena estuvimos hablando con Edgar y nos contó que estuvo todo el día formando al personal del restaurante, confeccionando el menú, y explicando de cervezas, maridajes y sabores para que puedan vender y ofrecer los grandes productos que tienen con sentido profesional. Esto nos encanta, y desde aquí queremos felicitar a Forty Burguer por esta apuesta. No basta con tener buenos productos para tener un buen restaurante, si quieren explorar la vía de los maridajes, lo que sin duda hace este local más atractivo todavía, la profesionalidad y conocimientos de su personal son elementos clave para conseguir el éxito. Lo pasamos muy bien y sin duda volveremos. Gracias a Héctor Pastor por las fotos, nos vemos en la próxima. ¡Salud!