Sushi + cerveza en Alberto Sushi Club.

Tras una temporada de inactividad forzosa en el blog volvemos esta vez combinando cerveza con sushi, de la mano de nuestro amigo Alberto Sushi Club. Ya habíamos probado su espectacular sushi y después de hablar algunas veces del tema con él decidimos elaborar un menú que combinara estos dos productos, seguros de que íbamos a obtener un gran resultado. Así que nos acercamos a su local en C/ Río Sena 10 en Ronda Sur, cargados de buenas birras dispuestos a disfrutar con el menú que nos iban a ofrecer.

El primer plato fue un maki de pepino y sésamo, que decidimos combinar con la japonesa Kirin Ichiban. Este maki es una combinación clásica y a la vez un acierto como entrante para un menú de sushi. Podemos distinguir bien el sabor del alga y del sésamo, además encontramos diferentes texturas y podemos distinguir que el arroz está cocinado a la perfección. La Kiri Ichiban funciona muy bien con este plato. Es una cerveza suave que a la vez tiene un amargor limpio y característico, un buen punto de partida para una degustación de varias cervezas. En un menú de sushi no puede faltar una birra japonesa y elegimos ésta en lugar de una de arroz puesto que tiene más presencia en boca.

Seguimos con un maki de huevas de pez volador con cangrejo y pepino. Otro plato que ofrece texturas muy interesantes, el pepino es crujiente y las huevas de pez volador son muy agradables en boca. El cangrejo, riquísimo, nos deja en boca un sabor complejo y original. Lo comemos con un poco de wasabi que le da un toque picante y lo combinamos con una Dougall´s 942, lo que nos parece una gran combinación. Esta APA cántabra es muy aromática, dando en nariz notas cítricas y tropicales, lo que marida a la perfección con los sabores del cangrejo. En boca es igual de fresca, pero a la vez especiada y amarga, y nos ayuda a pasar el picante del wasabi, pero con la presencia suficiente como para no desaparecer ante este sabor tan fuerte.

El tercer plato que nos prepara Alberto es otro maki. Esta vez de tartar de salmón con huevas de capelán al wasabi coronado con una mayonesa de cebollino y ahumado de origen japonés elaborada sólo con las yemas de los huevos. Un bocado muy cremoso en el cual la textura de las huevas ofrece un sabroso contrapunto. El salmón, simplemente espectacular, así como la mayonesa. Combinamos este plato con una Maisel´s Weisse y la combinación fue bastante acertada. Esta hefeweizen, con más cuerpo que las otras dos anteriores acompañó bien la cremosidad del plato. Los toques cítricos de esta birra alemana casaron muy bien con la mayonesa, además las notas de plátano y especias maridan muy bien con el salmón que es un pescado más graso.

El siguiente maki tenía por encima salmón sopleteado y en el interior langostino y aguacate. La textura del salmón pasado por el soplete es muy interesante, con un ligero tostado y ahumado por fuera, pero suave y jugoso por dentro. Lo combinamos con una Bizantina Ale, una cerveza maltosa y con toques de frutas maduras. Su sabor tostado acompañó muy bien al salmón, y los toques afrutados terminaron de redondear el maridaje. Una cerveza que elegiríamos para una barbacoa pero a la que este salmón sopleteado le sentó de maravilla.

Como quinto plato tomamos un nigiri de pez mantequilla sopleteado con salsa teriyaki. La primera sensación en boca es la del sopleteado del pescado, como la del plato anterior, y en seguida notamos la cremosidad que le da nombre a este pescado. La salsa teriyaki es dulce y tiene un final ácido, y acompaña perféctamente esta pescado graso. Acompañamos el plato con una Liefmans Goudenband y sinceramente, fue una combinación espectacular. Al igual que la salsa teriyaki esta cerveza ofrece notas dulces y ácidas, complementó a la salsa y las dos juntas ensalzaron el pescado. Un nigiri muy rico, recomendación total para los que no conozcan el pez mantequilla, y una gran cerveza.

El último plato de este menú fue otro maki, esta vez de pepino, sésamo blanco tostado y atún con salsa picante. Los sabores más intensos los dejamos para el final. Un atún buenísimo que combinaba muy bien con el sésamo y cuyo picante, intenso pero que no tapa los demás sabores, estaba contrarrestado con el frescor del pepino. Un plato redondo sabroso y potente, que combinamos con otra cerveza potente. Elegimos la IPA El Cantero, una cerveza contundente, aromática y amarga que acompañó muy bien a este gran maki. Realzó el plato y a la vez mantuvo su presencia, otra gran combinación que puso un gran colofón a este menú.

Lo pasamos muy bien, el sushi fue espectacular y las cervezas seleccionadas cumplieron perfectamente su papel, realzando sabores y ofreciendo matices nuevos a un producto que por sí ya es muy bueno. Esperamos repetir pronto en Alberto Sushi Club, y estaremos atentos a los cursos de elaboración y otras actividades que realizan. Un lugar de obligada visita para los amantes del sushi en Murcia. ¡Salud y buena cerveza!